Prólogo




Un año mas, se me concede el honor de prologar la Memoria del Curso. Sé que encuadernar todo un curso es una tarea muy grata, pero no sencilla. Hacer memoria de los hechos y los días es algo parecido al trabajo de los historiadores que han de elegir unos y otros para los anales. Y una Facultad no solo se construye desde sus grandes acontecimientos, que los hay siempre, sino desde la admirable sencillez de lo cotidiano, desde la clase diaria, desde los seminarios, las conferencias, los grupos de investigación. Una Facultad es esencialmente la vida de quienes la hacen posible, enseñando, aprendiendo, enseñando a aprender, aprendiendo a enseñar. En la Universidad de Málaga, orgullosa de ser universidad pública y Campus de Excelencia, todas las Facultades viven con la vista puesta en el futuro, pero Ciencias de Educación representa en mayor medida el futuro, porque contribuye a formar directamente a quienes van a moldearlo; a quienes tendrán que preparar profesores para un mañana que ellos mismos tendrán que imaginar no solo desde las mas avanzadas técnicas pedagógicas, sino los valores de libertad, de justicia y de solidaridad.

Es una labor ardua, incansable, que merece el reconocimiento de todos, desde el Decano y su equipo de gobierno, hasta el personal de conserjería, desde el alumnado que inicia sus estudios hasta el que ve próxima su culminación a un grado superior; o a quienes quieren hacer de la investigación un camino para su futuro.
Esta memoria es, una vez mas, un excelente motivo para le reflexión, que va desde el balance de nuestro ayer mas cercano a la ilusión del futuro.
Bienvenida.

Adelaida de la Calle Martín
Rectora de la Universidad de Málaga